42.000 viviendas vacías para 43.000 solicitantes de alquiler en el País Vasco

Resulta a todas luces paradójico. Miles de familias encuentran serias dificultades para acceder a una vivienda en Euskadi mientras se computan 42.000 pisos vacíos a los que podría darse salida. Proporcionalmente, el mayor volumen de viviendas se encuentra en Gipuzkoa -23.431-, prácticamente en la misma medida que Bizkaia -26.695-, a pesar de la enorme diferencia poblacional que media entre ambos. El Gobierno vasco, que prácticamente ha dejado aparcado destinar dinero público a la compra de vivienda y se ha marcado como objetivo prioritario el alquiler, lleva captados más de 5.000 pisos desocupados a través del programa Bizigune. Pero la demanda no cesa.

Actualmente hay más de 43.000 solicitantes de pisos de alquiler en la Comunidad Autónoma Vasca, de los cuales 12.239 pertenecen a Gipuzkoa, 24.000 a Bizkaia y 7.000 son alaveses.

El parque público del Gobierno vasco asciende a cerca de 11.500 viviendas gestionadas por Alokabide. De ellas, unas 6.000 son propiedad del Gobierno vasco, y el resto es vivienda privada que se ha movilizado a través de campañas como la que se acaba de poner en marcha, bajo el nombre Abre tu casa, ganas seguro.

El objetivo es que particulares que disponen de una vivienda que no utilizan habitualmente se la cedan al Gobierno vasco, de modo que ese piso pueda incorporarse al parque de alquiler para los demandantes de Etxebide.

Para ello es preciso vencer ciertos recelos. La directora general de Alokabide, Irune Berasaluze, explica que se ha detectado un descenso en el número de viviendas disponibles, por lo que han considerado necesario desplegar una campaña para movilizar esos pisos. “Les queremos informar a todos los propietarios de que existen dos programas del Gobierno vasco que les ofrecen unas garantías que en el mercado libre no hay”, revela.

Que a un propietario le dejen de pagar el alquiler o la vivienda hecha un desastre siempre ha sido un freno, más aún en una sociedad con un sentido tan arraigado de la propiedad. Un “salón itinerante” que recorre estos días toda Euskadi es el elemento visual más importante de la campaña desplegada con el fin de animar a los propietarios a conocer los pormenores de los dos programas existentes.

Uno de ellos es Bizigune, que lleva más de una década funcionando. En virtud de esta propuesta, el propietario de una vivienda vacía hace un contrato de usufructo con Alokabide y deja su piso durante seis años. “Nosotros la incorporamos al parque, y se la dejamos a un demandante de vivienda en alquiler. Ese demandante -precisa Berasaluze- nunca va a pagar en concepto de renta más del 30% de sus ingresos, lo cual no quiere decir que ese porcentaje sea el que cobra el propietario”, precisa la directora de Alokabide. “Cuando firmamos el contrato con el propietario, establecemos una renta, que es el 65% de la media del mercado libre. Independientemente de que el inquilino pague menos, o deje de pagar, al propietario se le garantiza el cobro. El propietario no firma el contrato con el inquilino, sino con el Gobierno vasco”, precisa la directora.

Existe una segunda propuesta dirigida a los propietarios. El Departamento de Empleo ha modificado la modalidad de acceso al Programa de arrendamiento de viviendas vacías de titularidad privada (ASAP). Gracias a él, se cede la vivienda a uno de los agentes colaboradores. Alokabide puede ser uno de ellos, pero también hay agentes de la propiedad inmobiliaria que intervienen. En ese caso, el contrato de alquiler lo firma el propietario con el inquilino, y este paga la totalidad de la renta establecida, que nunca va a ser más del 30% de sus ingresos.

http://www.deia.com/2014/12/08/sociedad/euskadi/la-cav-contabiliza-42000-viviendas-vacias-y-43000-solicitantes-de-alquiler